miércoles, 5 de junio de 2013

Carrera albiceleste y trote tricolor

Estadio Monumental de River. El escenario emociona a millones de colombianos, y hace rememorar el momento más latente de la historia del balompié cafetero. 0-5 en 1993. Argentina a repesca, Colombia catapultada hacia Estados Unidos, y en condición de favorita. Los Valderrama, Rincón, Asprilla, Valencia, etc. dibujaban una obra de arte bellísima para el museo del fútbol sudamericano, y la mejor para el de su país. Esto sucedió en el primer 'boom' del amarillo, azul y rojo.

Ahora, en la segunda explosión, propiciada por nada menos que un argentino, y varias estrellas que viven su día a día en el viejo continente, Colombia quiere sacar tajada de tierras albicelestes, custodiadas por Él. Mañana será el duelo.

El partido de este viernes antoja al amante del fútbol. La tricolor de Pékerman se medirá por primera vez, en partido oficial, a una selección históricamente gigante, la cual está en ¿por qué no? su mejor momento, desde que todos se encomendaron a Lío. Esto está ligado lógicamente al gran Messi que nunca había visto Argentina, y que lleva ya año y medio así. Este choque resultará fundamental para asegurar la clasificación a Brasil de cualquiera de los dos.

La albiceleste es favorita en toda regla. Es favorita porque a pesar de la ola de fútbol asociativo y fluido que ha mostrado Colombia, Argentina tiene a Messi. Y junto con Messi, a Higuaín, a Di María, y al 'Kun'. El partido pinta para ser un: Colombia intentando combinar en el centro, lanzar hacia afuera, y matar por dentro. Eso, con Falcao en el área, Teófilo barriendo, laterales larguísimos, y James en todas partes, está demostrado que da frutos (véase el 4-0 a Uruguay). Pero si a unos metros espera Messi para conducir a toda velocidad, sacarse tres jugadores, y pasar o disparar, la táctica colombiana no resultará tan rentable. A Messi le encanta correr. Ha encontrado esa libertad absoluta cuando viste la camiseta de su país. Ni hablar de Di María e Higuaín. Suficiente es decir que están en el Real Madrid.

Si Colombia está desorganizada en el momento de la pérdida, y no puede hacer presión sobre los lanzadores argentinos (Gago-Mascherano), el panorama para Pékerman se tornará poco favorable. En transición defensiva, la tricolor no ha demostrado estar cómoda. Edwin Valencia lleva tiempo sin jugar, motivo por el cual será suplente casi seguro. Carlos Sánchez es el candidato para acompañar a Aguilar. Ellos deberán estar pendientes de Leo en todas las fases del juego, en especial, corriendo para atrás. Messi en transición ofensiva es un coloso, y es casi un 80-20 lo suyo contra los dos centrocampistas colombianos. Una vez los supere, el astro mirará de frente a Carlos Valdés, y al otro central (¿Amaranto? ¿Aquivaldo? Yepes? ¿Zapata?). Ahí decide si regate o pase. Si es pase, espera Higuaín. Si es regate, dispara y la pegada de este monstruo es indiscutible.

Colombia deberá estar fina en el anticipo, como contra Uruguay. Ese día, Abel y Valencia tomaron cualquier balón dividido, y el equipo seguía atacando. Es arriesgado, pero es una opción. La otra, es que Colombia al contragolpe no va mal. Tiene a James y a Falcao. A estos les gusta correr. Rodríguez está en el Oporto, y el Tigre es el arma más poderosa del Cholo. Macnelly sería el lanzador. Está claro que los centrales argentinos no son Thiago Silva ni Pepe. Algo puede obtener Colombia en una transición ofensiva, pero defenderse en estático de la sociedad Ángel & Messi no es cosa de niños. Es la prueba de fuego para Colombia. Argentina querrá correr contra el trote tricolor. Veremos si Colombia intenta invertir la premisa, o efectivamente trata de seguir por la misma línea. Estadio Monumental. 7:30 p.m. hora Argentina. Dos horas menos en Colombia.





No hay comentarios:

Publicar un comentario