martes, 8 de enero de 2013
Jugar como bloque.
Un día después de la gala del balón de oro, en la cual se anunció el 11 ideal de la FIFA en 2012, se produjo un malestar desde las islas británicas, suscitado por sectores de la prensa inglesa. La consigna del malestar era "Es increíble que no haya un solo jugador de la Premier League en esa formación".
El 11 ideal de la FIFA está conformado desde el portero hasta el centrodelantero por jugadores de la liga española. Casillas; Alves, Piqué, Ramos, Marcelo; Xavi, Xabi Alonso, Iniesta; Messi, Falcao, Cristiano. Una alineación que a simple vista, parece indestructible, pero en realidad está lejos de serlo.
En las últimas 24 horas, en Inglaterra suenan intenciones de un partido entre los 'All Stars' de la Premier League, y el 11 ideal de la FIFA (Y la BBVA). Un choque entre España e Inglaterra. Sería memorable y espectacular. Sin embargo, hasta que se produjeron esas intenciones de partido, nadie se había preguntado por el nivel competitivo del 11 ideal como bloque. Ahora que surge, se hacen revisiones, y hay señalados.
En Inglaterra tendrían la ventaja de conocer la alineación rival, y en función de esta, hacer una capaz de borrar a los ibéricos. El 11 de la BBVA tiene muchas carencias, lo cual es aprovechable para conformar un equipo de miedo.
Sobre Íker no hay debate, a pesar de que pase por horas bajas. Tal vez las peores de su carrera. Sin embargo, se le llevaría a jugar. En el eje de la zaga, Piqué, en un excelente estado de forma, brinda muchísimas garantías en defensa, y en ataque, como 'hombre de más'. Ramos está a media temporada de cumplir dos años en la demarcación de central. Ahí se desenvuelve muy bien. La pareja Ramos-Piqué se complementa y es buenísima. España demostró tal cosa.
El lastre está en los laterales. Marcelo, a pesar de brindar una salida de balón que cualquier equipo desearía, no da tranquilidad por su defensa tan caótica, y en la transición defensiva nunca ha demostrado ser un as. Dani Alves pasa por el peor momento de su carrera. Ya no es el potro de rabia y miel que solía ser. Displicente en defensa, a menudo erróneo en ataque, es el gran señalado del 11. Dos extremos de jerarquía de la Premier darían muchos dolores de cabeza por los flancos. Jordi Alba es la solución para la banda izquierda. Los grandes equipos están formados por pequeñas sociedades, y a pesar de que Marcelo-Cristiano sea brutal, Alba-Iniesta es de miedo. Véase Eurocopa. El de L'Hospitalet, en ataque es una bala, define a toda velocidad con una frialdad digna de los mejores. Asiste perfectamente, y en transición defensiva y uno contra uno es lo mejor de España por la izquierda. Se duerme tirando el fuera de juego. Su único lunar. En la derecha, están las opciones de Juanfran, Monreal, Iraola, Arbeloa, Adriano o el mismo Montoya. Esta demarcación es una incógnita.
En la mitad del campo, Xavi e Iniesta marcan el camino. Un equipo jugará como juegue su mediocampo. Y en este equipo están dos interiores con doctorado en el juego de posición. A sus espaldas debería estar el prodigio, la mente brillante del círculo central, el rey de la inteligencia posicional, el pulpo de Badia, Sergio Busquets. Sin embargo, estaría Xabi Alonso. Con esto no quiero decir que el tolosarra sea un mal jugador. Creo firmemente que es un jugador excelso, pero no posee las características para jugar con tantos metros bajo su responsabilidad. Sin escudero, Xabi baila solo, y no es lo mismo. Khedira es la mejor compañía para él, así como Busquets en la selección, pues tiene un bastón. Sin ellos, sin su apoyo, baja muchísimo su calidad. Sergio en cambio, lo entiende absolutamente todo. El Xavi-Busquets-Iniesta garantiza el estilo definido y la buena ejecución de este.
Sobre Cristiano-Falcao-Messi, una bomba en la delantera. A pesar de que haya tanta calidad en tres jugadores, debe tenerse en cuenta que la explosión de Messi se produjo cuando pasó al carril central. Lío, escorado a una banda, deja de tener la influencia tan brutal que produce en el juego. Alejarlo de Xavi e Iniesta no es una buena idea, pero en la derecha no deja de ser estratosférico.
Falcao juega en un equipo que tiene un máster en transiciones de la mano del Cholo. En ataque estático, está por verse la efectividad del Tigre, aunque hoy día, no hay mejor ariete que él. Cristiano sería la estaca parar estirar la lona y el jugador que bordea el fuera de lugar para pedirla al espacio. En eso, el portugués es letal. Con eso, y sacrificio defensivo, Cristiano se vuelve clave.
Para ganar a un equipo tan excelso como el que pueden armar los mejores futbolistas de la Premier, entre ellos Cazorla, Silva, Mata, Touré, David Luiz, Kompany, Van Persie, Bale, Baines, Fellaini, Rooney etc, es necesario jugar como un todo, como un bloque. El "todos" tiene que brillar sobre el "yo". Los bloques duros y competitivos. Y el 11 que presenta la FIFA no es un bloque, se rompería. Eso es lo último que se puede permitir un equipo.
domingo, 6 de enero de 2013
Siete, ocho, 'falso nueve', y diez.
"Cada vez que Messi marca uno de sus goles planetarios, un adjetivo se suicida, con lo que la necrológica de los adjetivos suicidados alcanza un tamaño formidable, hasta el punto de que el diccionario anda lanzando señales de socorro." Esto escribió Martí Perarnáu hace ya más de un año, luego de la final del Mundial de Clubes, segunda cumbre del Pep Team en sus cuatro años (siendo Wembley la más alta, y la primera).
El derbi contra el Espanyol no tuvo como consecuencia todos los focos y las cámaras buscando a Messi. Tampoco vimos uno de sus goles planetarios. Sin embargo, en este partido, el astro demostró como casi nunca, una particularidad que lo legitima para muchos entendidos, como el mejor jugador del mundo, pues lo completa. Messi se movió durante todo el partido de 3/4 de cancha hacia atrás. Se quedó con Xavi, por delante de Busquets, marcando el ritmo del encuentro a placer. Al hacer esto, cedió el protagonismo a un Cesc superlativo, y a un Iniesta que cada día demuestra por qué estará en Zúrich apretando sus puños, nervioso esperando a que su nombre esté en el sobre. Ambos, funambulistas sobre el césped (Martí Perarnáu copyright). Además de a Pedrito, que se convirtió en la referencia, y pudo irse con un póker.
Busquets, quien ya lo entiende todo, partido a partido imperial, sujetó todo el equipo. Amo del círculo central. Con tal garantía a sus espaldas, Xavi y Messi se dispusieron a sentar la base de una nueva obra de arte del equipo. Hay momentos puntuales del encuentro en los que se puede comprobar esto sobre el argentino, además del mapa de acción de Lionel en el primer tiempo, que se reafirmaría en la segunda parte (vía @38ecos).
Mejores jugadas del partido (vía ESPN Deportes)
Atención al primer gol. Messi por detrás de Iniesta, Cesc y Xavi (Este último subió para sorpresa desde segunda línea). En el segundo gol, Messi dribla en 3/4 y cede a Cesc. Fábregas desborda y termina en gol de Pedro. En el gol anulado a Pedro, es Messi quien abre a banda. Y así fue todo el partido. Aquí el mapa de acción de la primera mitad.
En Zúrich estarán tres jugadores excepcionales. El mejor extremo del mundo, paradigma de garra y ganas, además de portento físico envidiable. Un mago, acróbata, ilusionista, el jugador que según muchos, es el único capaz de desparecer el cuero por segundos. Y un pequeñito, un hombre de 25 años y 1.69 de estatura , quien como viene demostrando, toca como el mejor 8. En sus inicios legitimó su desborde, como pocos 7. Golea como 9, aunque sea 'falso'. Sus 91 dianas de 2012 no dan lugar a un debate. Y de nacimiento, desde Rosario, Argentina, hasta Barcelona, España, es 10. Si gana su cuarto balón dorado mañana, escribirá otra gran página en su ya agigantada épica. Lo que ya es seguro, es que en su leyenda, está en la retina del balompié mundial como el futbolista total.
jueves, 6 de diciembre de 2012
La madurez del joven rey.
El heredero del trono, aún muy joven, con sólo 21 años, tenía toda la presión del reino en su lomo. Muchos se preguntaban cómo iba a librar las batallas. Algunos ponían en duda su capacidad de hacerlo tan bien como alguna vez lo hizo su antecesor. En su primer semestre al mando, se desempeñó aceptablemente bien.
Él estaba acostumbrado a atacar por el flanco derecho, hasta que un día, para una batalla que se proyectaba épica, en tierras de guerreros blancos, fue por el centro. Para ese día, él ya llevaba un año completo mandando con el '10' en la espalda. En esa batalla, él fue protagonista. Tres acciones suyas acabaron con el temido ejército blanco. Días más tarde, con su cabeza, sentenció a unos diablos rojos para adjudicarse Europa.
No todo el mérito fue suyo. Sus compañeros de combate peleaban con una sutileza que tras de sí, escondía todo lo letal de su técnica. Era bello verles luchar, pero dejaban a sus oponentes masacrados. Cuando él pasó al centro, sus compañeros contendieron aún mejor. Eran imparables.
Casi un año más tarde, chocaron con una muralla transalpina color negro y azul. Muchos creyeron que se acababa. Que era el fin de la hegemonía del jovencísimo rey, quien no hizo mucho para poder derrumbar el muro, y que su legión terminaba.
Unos diez meses después, el rey y sus escuderos alcanzaban la gloria luego de una dura derrota contra unos jinetes blancos bien agrupados, férreos y veloces, venciendo a los mismos en su propio feudo y legitimándose para una última batalla contra los diablos rojos de hace unos años. En esa última, el rey brilló como nunca, y con un flechazo de media distancia puso por delante a sus guerreros. Un compañero suyo mandó un cañonazo envenenado, el cual dejó atónito a todo el que tuvo la suerte y el honor de verlo, y que terminó la contienda.
El rey, agigantado, en el cuarto año de su mandato, quiso depender más de sí mismo para ganar las batallas que alguna vez logró en colectivo. Al final del calendario, eso llevaría al rey, tras caer contra unos escuderos de raíces anglosajonas, a derramar lágrimas. Y a todos los que observaron la batalla, a sincronizar su llanto con él, y con su caballería, pero a apoyarle, y entre tristeza absoluta, soltar al unísono una voz de aliento. Ese año, disperso para todo el conjunto, terminó con dos derrotas durísimas, la pérdida del continente y una victoria de consuelo contra unos vascos rebosantes de pudor. Tras esos hechos, el estratega de batalla se marchó, lo cual supuso un golpe muy fuerte para el rey, quien perdió a su consejero.
El asistente del estratega dio un paso al frente, y decidió relevar a su viejo superior. El rey, empezando su quinto año, sapiente de sus errores pasados, y con su conciencia cargada, quiso meterse más al colectivo. Llegó un luchador rapidísimo para el flanco izquierdo y por el centro se asentó un viejo compañero y amigo, para mayor supremacía.

Tras cinco años, el antiguo rey puede mirar desde el retiro, y decir sin tapujos que sabía que sería así. El nuevo rey, aún joven, pero ya maduro, hace mejor a su ejército y así, se hace mejor a sí mismo.
domingo, 25 de noviembre de 2012
Lo "imposible" ya es real.
Decían que Cesc sobraría, que no tendría sitio. Otros abogaban por su fichaje alegando que él sería el recambio del director, Xavi Hernández, una vez se fuera. Pero para eso falta un tiempo. ¿Cómo alinearlos a los tres? Guardiola optó en el debut liguero por una defensa de 3. Resultó un 5-0. Sin embargo, con el tiempo, tal esquema perdió credibilidad.
En el último tramo de la temporada, Cesc desapareció de las alineaciones. Estuvo en ambos choques contra el Chelsea, pero el culmen fue su suplencia frente al Real Madrid en el Camp Nou. Fábregas no pudo comprender al 100 el esquema de juego, como después confesó. Y Guardiola no supo dar en la tecla para colocarlo.
Él partía siendo un 'falso' 9, así como Messi. 3-4-3 y doble ariete mentiroso. Esa fue la apuesta de Pep la mayor parte de la temporada. No funcionó del todo bien. A día de hoy, Tito ha encontrado la forma que, de momento, parece ser la más adecuada para el de Arenys sin turbar la defensa de 4. Iniesta partiendo desde la izquierda y Francesc como interior, la posición para la que se le trajo. Pep lo intentó en su momento, como en Stanford Bridge, sin obtener frutos. Tito sí los está logrando porque tiene a favor varios recursos más que Pep en la temporada anterior.
Xavi, quien fue muy utilizado por Pep en la 10-11, pasó por un estado de forma bajísimo. El peor de su carrera, tal vez. Fatiga cognitiva y sus problemas en el sóleo, motivos principales. Hernández es igual a control. Sin Xavi, el control se pierde, y los velocistas (Cesc y Alexis), con patrocinio de Messi, olvidaban al equipo. Piernas corriendo a lo largo, y no balón corriendo a lo ancho. El Barcelona del galope y el descontrol. Con Xavi de vuelta, hay más garantías de estilo.
Xavi, quien fue muy utilizado por Pep en la 10-11, pasó por un estado de forma bajísimo. El peor de su carrera, tal vez. Fatiga cognitiva y sus problemas en el sóleo, motivos principales. Hernández es igual a control. Sin Xavi, el control se pierde, y los velocistas (Cesc y Alexis), con patrocinio de Messi, olvidaban al equipo. Piernas corriendo a lo largo, y no balón corriendo a lo ancho. El Barcelona del galope y el descontrol. Con Xavi de vuelta, hay más garantías de estilo.
En la Eurocopa ocurrió algo importante. Iniesta partiría desde la izquierda, acompañado de Jordi Alba. Esta sociedad terminó siendo la más letal de la competición, y consagró a Iniesta como el mejor jugador del torneo. En el Barcelona, la llegada de Jordi Alba legitima al manchego para arrancar desde la banda porque cuando el de L'Hospitalet lo dobla, lo convierte en un interior/mediapunta más.
El curso pasado, esto no ocurría porque no había una bala llegando desde atrás por el flanco izquierdo. Ahora que sí la hay, cuando se desdobla para atacar, Iniesta se mueve varios pasos hacia dentro para la asociación. En el panorama, don Andrés, Cesc, y Messi rompen por dentro y Jordi Alba emula ser extremo. Ya lo había dicho Tito. "Ellos pueden jugar juntos perfectamente. Lo harán más seguido".
Moscú y Valencia fueron testigos de este sistema de inicio. Portería a 0 en ambas ocasiones. 0-3 y 0-4 a favor. Iniesta desatado, sin inhibiciones, tocando su música favorita y bailándola al mismo tiempo. Y Cesc, un grosso por dentro. Con Xavi feliz, Messi siendo el de siempre, y estos dos cracks destilando talento, transpirando magia, el Barça se vuelve El Barça de todos.
En Rusia, Andrés y Cesc se juntaron en una jugada apoteósica, al tirar un sinfín de paredes, la cual levantó a más de un aficionado. Probablemente Tito esperaba a que Fábregas se asentara como interior para probar. Habiéndolo hecho, alineó a Xavi, a Iniesta y Fábregas obteniendo juego traducido en resultado para lograr el aval de la afición.
Ellos están llamados a estar presentes en el 11 de las grandes noches, de los eventos importantes, de las citas con las más difíciles. Después de varias fórmulas sin el producto deseado, esta pinta ser la solución que se buscaba. Para los que decían que Cesc era un imposible, hoy es una realidad. El Barça de los mejores números de su historia, lo es en parte por Cesc Fábregas, titular en 12 de los 13 juegos de Liga. Cesc e Iniesta, surtidos por Xavi prometen que la pasaremos bien. Y sí que está siendo así.
domingo, 18 de noviembre de 2012
Sobre el giro hacia la izquierda.
1-. La llegada de Jordi 'Bala' ha dado un recorrido de miedo a la banda izquierda, territorio prácticamente inexplorado en cuanto a ataque se refiere en los últimos años del club. Abidal, un lateral propiamente más defensivo que ofensivo, se encargaba de brindar esa sobriedad y equilibrio al sistema de juego del equipo. Ahora, con Dani Alves lejos del rendimiento al que nos tiene acostumbrados, y Jordi Alba siendo el de la Eurocopa, demostrando que es el mejor fichaje que se pudo haber hecho, el vuelco hacia la 'zurda' es real. Prueba de ello es la cantidad de asistencias que ha dado el de L'Hospitalet en lo que va de campaña. Además de haber marcado goles disfrazado de Messi, con una frialdad inverosímil para la definición en velocidad.
2-. Don Andrés Iniesta Luján, el 'messi de las sombras', el que deslumbra más con la casaca roja que con la azulgrana (y si se tiene en cuenta que con el Barcelona es un iluminado, con España es diabólico), ha tomado un protagonismo aún mayor en el sistema ofensivo. Sus acciones en algunos goles marcados a rivales como la Real Sociedad, Real Madrid, Spartak, Celta de Vigo, o Zaragoza lo confirman. Iniesta es más protagónico, más vertical, y más 'de la roja', porque se juega más por su banda. Ya en la Eurocopa demostró junto a Alba que juntos serían una garantía de ataque en el Camp Nou.
3-. David Villa ha regresado con hambre, luego de casi un año sin comer. Se puede decir que el asturiano ya ha obtenido la titularidad a pesar de no haber jugado 90 minutos ningún partido en este curso. Villa ha aportado un aire al equipo con los goles que tanto hicieron falta. Además, él es garante a la hora de barrer defensas. Tito ha dosificado el rendimiento del 'guaje', y gracias a ello, ha vuelto letal y al once inicial. Su labor en el equipo es impagable.
Respecto a la derecha, no podemos olvidar al que, en mi concepto, es el jugador inamovible del esquema: Pedro Rodríguez. Pedrito es un fichaje más luego de una temporada echándole de menos. Su nivel es superlativo. Sin embargo, su banda no es el eje del ataque del equipo pues el potro Dani Alves no atraviesa sus mejores días. A cambio, Martín Montoya ha demostrado que él está. Y sí que está. Su nivel de madurez táctica para saber cuándo subir y cuándo no aporta muchísima sobriedad a la defensa (véase vuelta de Supercopa contra el Madrid, por ejemplo o el clásico de Liga en el Camp Nou). El Barcelona ha rememorado el golpe por derecha contra el Rayo, por ejemplo, pero mientras Alves no regrese de las sombras (Tito lo está recuperando a base de minutos, así como a Villa), no se notará tanto.
Una vez que Alves regrese, tendremos noches de bombardeo por ambos flancos como en Vallecas. Mientras tanto, el cuero seguirá yendo hacia la izquierda.
lunes, 1 de octubre de 2012
Detrás del científico.
Se bañó tan rápido como pudo, se vistió con un sueter café que encontró sobre la lavadora de su apartamento y el primer jean que vio. Antes de partir hacia la Universidad Nacional de Colombia, recordó que no había desayunado. Tomó dos panes y un té de hace dos días el cual estaba en su nevera. Se calmó un poco y buscó su maleta. Empacó su cámara, una libreta para tomar apuntes y un lapicero. Al fin, salió de su apartamento.
Salió a toda velocidad hacia el Portal Norte de Transmilenio y al llegar, se dio cuenta de que no tenía dinero para comprar pasajes. Pensó qué hacer durante unos cinco minutos y caminaba de un lado a otro, presa de la rabia. Recordó entonces que tenía monedas en el bolsillo más pequeño de su maleta. Sacó todas las que habían y encontró 1900 pesos. Compró el pasaje y tomó velozmente el articulado que lo dejaría en la estación de la calle 45.
El viaje desde el norte hasta la 45 se hizo eterno. Ahí se encontraría con Diego, un amigo de la universidad. Ellos se dirigirían hacia la Universidad Nacional para buscar un científico. Cada uno había estado siguiendo un tema de ciencia durante todo el semestre por una materia llamada "Introducción al Lenguaje de la Ciencia" en la Universidad Externado de Colombia. Sebastián había escogido Astronomía como ciencia a seguir. Diego escogió Biomedicina. Esta vez, para continuar con el seguimiento, debían encontrar y entrevistar un científico.
---¿Qué vamos a hacer ¿Hacia dónde vamos?---preguntó Sebastián, ligeramente desubicado pues llevaba sólo nueve meses viviendo en Bogotá. ---Pues ir a la Nacional y buscar en la facultad de física lo suyo.--- le respondió Diego en un tono despectivo. ---Todo bien. ¿Usted qué va a hacer?--- dijo Sebastián. ---Allá miro si encuentro algo en la facultad de medicina---, sentenció Diego.
Caminaron desde la avenida Caracas hasta la carrera 30 cruzando toda la calle 45 hablando de cosas banales y cotidianas. Cosas de las que hablan dos estudiantes de 17 y 18 años, que parecían poco concentrados en hacer lo que debían. Al llegar a la universidad más grande del país, se sintieron intimidados por el ambiente. Las paredes llenas de imágenes de revolucionarios, frases pro-socialistas y que apoyan el sistema de eduación público, y estudiantes con aspectos algo particulares. Algo muy distinto a lo que se vive en la universidad a la que ellos pertenecen, donde existe y es aceptado el discurso el cual dice que un graffiti es considerado algo que haría un vándalo, no un estudiante deseoso de expresarse.
Se podía agarrar la tensión en el ambiente, y al mismo tiempo se percibía una vibra de libertad de expresión, donde nadie coarta la opinión propia, y afán de aprender. La tensión la estaban creando tal vez ellos en sus cabezas, pues no estaban para nada acostumbrados a un entorno tan distinto al de la universidad privada y pudiente. Una vez dentro de la universidad, le preguntaron al celador por la facultad de física. ---¿Dónde queda la facultad de física?--- interrogó Diego. ---¿Física? Mmm, la verdad no tengo idea, muchachos.---contestó el celador, que miró con indiferencia al par de estudiantes, a simple vista, foráneos.
Ambos continuaron su camino hacia los adentros del recinto educativo más conocido de Colombia. Arrivaron a lo que podría decirse que es el punto de encuentro o centro de la universidad, la plaza del Ché. Se le llama así por una gran pintura del Ché Guevara que hay en la pared de uno de los edificios que están alrededor de tal lugar. ---¿Por qué no le preguntamos a los estudiantes?---, dijo Sebastián, desesperado por encontrar su lugar de destino.---Porque por ahí nos dicen mal dónde quedan las cosas para que nos perdamos. Estamos en la Nacional, chino. No en el Externado---.
Por fin encontraron a un vigilante que rondaba cerca de una gran zona verde ubicada al frente de la gran plaza.---¿Dónde queda la facultad de física?---, preguntó Sebastián.---No sé chino, ahorita mismo no me acuerdo---. ¿Y la de Medicina? añadió Diego. ---Sí, esa queda aquí mismo. Siga derecho por aquí y a la derecha está.---. Ambos respondieron con un "Gracias" casi al mismo tiempo.
Mientras caminaban hacia la facultad de Medicina, estaban pendientes de dónde podía quedar la facultad de física. Aún así, no encontraron nada relacionado. Llegaron a Medicina y lo único que pudieron encontrar fue muchos anuarios de neurocirujanos. ---Qué viejos se graduaban antes--- dijo Diego. Salieron de ahí y se dispusieron a buscar de una vez por todas la facultad a la cual necesitaba llegar Sebastián.
Regresaron a la plaza del Ché y vieron enfermería, luego empezaron a caminar hacia la parte occidental de la universidad. Observaron Derecho, Ciencias Humanas, Ingenierías, Derecho, Química y otras más. Sebastián se preguntó a sí mismo "¿Por qué aquí no hay Comunicación Social y Periodismo?" y después interrogó a Diego con esa pregunta. ---Aquí no hay Comunicación porque los graduados serían los más izquierdistas del mundo, y al gobierno no le conviene eso---. Se mostró pensativo por un momento y pareció impresionado, pero luego no le dio importancia y siguieron con la búsqueda del experto en Astronomía.
El cansancio y la fatiga empezaban a acosar, y ellos aún no encontraban la facultad. Llegaron hasta la facultad de Cine y Televisión. Sebastián recordó que su primo, quien estudia eso ahí, le dijo una vez que la suya era la última facultad de la Universidad. Que quedaba muy, muy lejos. Dieron marcha atrás y vieron un camino por el cual no habían pasado todavía. Caminaron y caminaron hasta que llegaron a un edificio de tamaño mediano que decía "Facultad de Ciencias". ---¡Aquí fue!--- exclamó Sebastián. Se acercaron y le dijeron a un celador que necesitaban un astrónomo. ---Vayan al observatorio, muchachos. Es un edificio pequeñito que arriba tiene como una coquita--- dijo en tono cansado. Los dos se miraron y se dijeron que no sabían que en la Nacional había observatorio. Le agradecieron al celador y fueron hacia su nuevo destino.
El observatorio estaba cerca de la facultad de Ciencias. Llegaron a la puerta y vieron un volante que decía algo relacionado con una convención de astronomía. Sebastián consideró eso como excelente y se sintió afortunado. Entraron y parecía estar solo. Había un ambiente inhóspito y oscuro, cuando se oyó una voz aguda que los sacó de su impresión por la penumbra del sitio. ---Buenos días, a la orden.--- mencionó la que parecía ser la secretaria del lugar. ---Buenos días, disculpe... lo que pasa es que necesito un astrónomo para hacerle unas cuantas preguntas. Soy estudiante de Comunicación Social y Periodismo de la Universidad Externado de Colombia.--- dijo Sebastián. ---Un astrónomo... pues mira, los sábados es medio difícil que consigas un profesor, pero te puedo dar el correo del director del observatorio. Le mandas un mensaje y pues cuadras con él. Igual entre semana es más fácil que consigas un docente ---Sí, por favor.--- respondió un impresionado Sebastián, quien creyó que sería más difícil. Sacó su celular y se dispuso a anotar los datos. ---Se llama José Gregorio Portilla. Su correo es Jgportilla@unal.edu.co---. ---Gracias por todo. Me dices que entre semana es más fácil ¿Cierto?--- insistió Sebastián. ---Sí, así es--- le contestó. ---Por acá estaré entonces. Gracias de verdad. Que tengas buen día---. Sebastián sintió que había avanzado un poco, pero no estaría tranquilo hasta haber realizado la entrevista. Salieron del observatorio y morían de hambre. Fueron hacia la cafetería que queda en la azotea del edificio más moderno de la universidad. Terminaron ese día con un palito de carne horrendo y una gaseosa no muy fría.
***
El lunes siguiente, a las cinco de la mañana, Sebastián ya estaba despierto. Entró a bañarse cinco minutos después, y mientras lo hacía, pensaba en todo lo que debía realizar en la semana. Tenía todo tipo de trabajos en las distintas materias de la universidad. Conseguir la entrevista era uno de esos. Él debía llegar a la universidad a las nueve de la mañana, pero llegaría a las siete para preparar una exposición de historia. Salió de su casa a las 6 y se quejó, como cada lunes, del trajín que suponía entrar a un Transmilenio que fuera hacia el centro de Bogotá a esa hora.
Se bajó en la estación de Museo del Oro. Ahí, caminó hacia la Universidad del Rosario. Entrar era muy difícil para un estudiante de que no fuera de ahí. Para su suerte, tiene un primo que estudia Historia allí. Ingresó para buscar un libro que le sirviera de referencia para la exposición. Luego, subió a su universidad a las 7:10 de la mañana. Habiendo llegado al Externado, hojeó un poco el libro que pidió prestado en la biblioteca rosarista. Dos horas más tarde, se encontró con Melisa, una amiga suya que tampoco había hecho nada referente al trabajo para Lenguaje de la Ciencia. ---Parce ¿Ya hizo lo del científico?--- preguntó ella. ---No, todavía no. Estoy muy estresado por eso.--- respondió Sebastián. ---Vámonos para la Nacional. No entraré a Inglés. Iré a buscar un neurólogo.--- dijo ella. El trabajo de Melisa tenía que ver con Alzheimer. ---Bueno, yo tampoco entro y nos vamos.---. Así, ambos partieron hacia la Nacional (Sebastián por segunda vez).
Bajaron la calle 12 a toda velocidad. Tomaron un bus en la calle 19 y llegaron raudamente a su destino. Entraron por la calle 26 y fueron hacia la plaza del Ché. Sebastián recordó entonces su experiencia del sábado. ---Separémonos. Yo voy para Medicina--- dijo Melisa. ---Listo. Yo voy para el observatorio.--- respondió Sebastián. ---Yo te llamo y nos vemos acá. Que te vaya bien.---. exclamó ella. ---Igual a ti--- sentenció él.
Sebastián casi no recordaba dónde quedaba el observatorio, así que una vez más se vio obligado a preguntar. Un señor que llevaba una carretilla cargada de gaseosas, notó que Sebastián se mostraba desubicado. ---¿Qué busca, chino?--- gritó. ---El observatorio--- respondió él, mostrándose desconfiado. ----Vea, siga para allá. Es llegando a la 30---. Sebastián sabía que era mentira, por lo que hizo caso omiso y siguió su camino. Al llegar a la facultad de química, se ubicó. Caminó en diagonal hacia la derecha y divisó la cúpula del observatorio. Se dispuso a entrar.
La puerta principal estaba abierta y entró como si nada. Esta vez, no encontró a nadie y todo parecía estar apagado. De repente, salió un anciano de estatura baja y con aspecto de amargado. ---¿Qué necesita?--- preguntó tajante. ---Ehh, necesito un astrónomo para hacerle unas preguntas. Vine el sábado y me dijeron que podría ser con José Gregorio Portilla.---. ---Todo eso es con la secretaria. Ella no está. Vuelva cuando esté---. respondió el viejo, casi sin mirar a Sebastián.
Sebastián salió algo enojado por el trato que recibió de parte del anciano. Resignado, llamó a Melisa a preguntarle dónde estaba. Ella le dijo que ni siquiera había llegado a dónde se dirigía. Sebastián caminó en círculos en el pasto de al frente del observatorio. Llamó a Diego y le dijo que no había encontrado nada, otra vez. En ese momento recordó que Melisa le dijo ---Parce, hay que ser muy insistente. Recuerda lo que dijo Raigosa.---. Sebastián se decidió a entrar una vez más para buscar a su astrónomo.
Entró y esta vez sí estaba la amable secretaria del sábado. Sebastián le dijo que necesitaba al director del observatorio y ella le respondió. ---¿El profe Portilla? Está ahí en la sala. Espera que salga y te atiende---. Sebastián quedó atónito. Cuando asimiló que haría su entrevista probablemente en cinco o diez minutos, se dio cuenta de que no había llevado su cámara ese día. Él no contaba con ir a la Nacional, por eso no la metió en su maleta.
Él había redactado seis preguntas con antelación. Esas sí las tenía en su cuaderno. Mientras pensaba y repensaba las preguntas, apareció por el pasillo un hombre muy alto, de aspecto imponente y gran porte. Un intelectual a simple vista. Miró de reojo a Sebastián y se dirigió hacia la secretaria. ---Profe, este estudiante lo necesita.--- le dijo la secretaria. ---Dígame, joven.--- exclamó el profesor Portilla. Enseguida habló, Sebastián notó su tono de voz, grueso y sobrecogedor. Sebastián, quien estaba muy nervioso en un principio, le dijo ---Es un gusto, profesor. Me llamo Sebastián Duque Sánchez. Soy estudiante de Comunicación Social de la Universidad Externado. Quería ver si podía concederme unas preguntas. No demoraré.---. ---¿Cuánto es "no demoraré"?--- replicó el profesor. ---Veinte minutos---. dijo Sebastián. ---Quince, hermano. Estoy ocupadito ahora.---. ---¡Listo!---. dejó salir Sebastián. Él estaba emocionado por haber conseguido la entrevista, pero preocupado por la poca disponibilidad que de entrada mostró su científico.
Caminó con el profesor Portilla hacia una oficina grande. Parecía una sala de reunión. Estando ahí, Sebastián le explicó porqué debía realizar la entrevista. Le explicó que estaba llevando una bitácora de un tema científico particular en una materia llamada "Introducción al Lenguaje de la Ciencia", más específicamente Astronomía. Y que para esta vez, debía entrevistar un científico perteneciente a su ciencia. ---Pregunte pues---, dijo José Gregorio. Ahí comenzó la entrevista.
¿Por qué decidió ser astrónomo? preguntó para empezar, Sebastián. El profesor reaccionó de manera no muy agradable a esa pregunta, cambiando su semblante de uno agradable a uno que proyectaba fastidio. ---Porque me gusta. Porque desde siempre me ha apasionado. Desde soy muy pequeño.---. Esa fue toda la respuesta. Sebastián se acordó de su profesor, Andrés Raigosa, quien les había dicho que hicieran durar la entrevista. Acabar en cinco minutos no era señal de nada bueno. Pensó entonces que en tres minutos el profesor Portilla lo iba a sacar de la sala en la cual se encontraban.
¿Qué es lo que más le apasiona de su investigación? interrogó Sebastián. El semblante del científico cambió nuevamente, pero esta vez, para bien. Este último respondió que lo que más le gusta, es observar que la naturaleza está matematizada. Que le gusta mucho el hecho de poder predecir fenómenos, de contrastar, y el hecho de que su trabajo le parece muy particular. En ese momento, le habló a Sebastián de un concepto que lo dejó anonadado. Le habló acerca de algo que él llamaba "La frontera del conocimiento". ---¿Qué es eso?--- preguntó Sebastián. El profesor Portilla le dijo que hay que leer, estudiar mucho para llegar a esa frontera. Se alcanza con años de dedicación y experiencia. Cuando se está en ese punto, uno puede plantear cosas que no se han hecho, y se puede estar seguro de ello pues la experiencia y el saber te ofrecen respaldo.
La siguiente pregunta fue ¿Ha realizado publicaciones? Si sí ¿En qué medio? y si no ¿Por qué? ---Claro que he publicado. En parte vivo para ello---. ---¿En qué medio ha publicado?--- insistió Sebastián. Le respondió que ha publicado en la revista de la Academia Colombiana de las Ciencias Exactas, de la Academia Colombiana de Física, en la revista Mexicana de Astronomía entre otras.
Dígame algo negativo de su trabajo, le pidió Sebastián al científico. Este último le contestó que principalmente considera negativo el fundamentalismo de algunos científicos. Sebastián le pidió que se explicara un poco más. El profesor accedió gustoso. Le explicó que el fundamentalismo se basa en que algunos científicos se "casan" con algunas teorías y, por lo tanto, tienden a no aceptar otras. Portilla dice que en eso de la Ciencia hay que ser abierto y práctico. Que no hay que estancarse con una sola teoría. Mencionó también que las nuevas generaciones de científicos realizan descubrimientos importantes y hacen públicas sus teorías. Comentó que, por eso, los que más inmersos están en fundamentalismos son los científicos experimentados, casados con la teoría de su dominio y agrado. Sebastián se quedó algo confundido, pues en su clase de Lenguaje de la Ciencia, su profesor dio unas nociones de ciencia, y dentro de estas había una que planteaba que los científicos en su mayoría aceptan refutaciones para ser mejores.
¿Cree que debería fomentarse el estudio de astronomía en Colombia? José Gregorio respondió de manera muy segura y tajante que sí. Dijo que en este país estamos muy "quedados" en el estudio de la astronomía. También mencionó que estamos un país de clima caprichoso para estudiar astronomía, por la posición cercana a la línea ecuatorial. Sebastián no comprendió muy bien eso, pero lo dejó continuar. Dijo medio enojado que no hay profesionalidad ni compromiso de parte del gobierno para el estudio de estos. Mostró ganas de tener más colegas manejando un lenguaje científico-matemático. Sentenció seguro de sí mismo que el estado no ayuda a fomentar el estudio de esta. Colciencias no recibe el apoyo necesario para hacer algo significativo y que tal vez por eso, otros países están mucho mejor posicionados dentro de un ranking astronómico.
¿Se están formando ahora mismo una buena cantidad de estudiantes en esto de la astronomía? Para responder esto, el profesor apeló a una cita bíblica. Dijo "Muchos somos los llamados, pero pocos los escogidos". Y aclaró que al decir muchos, igualmente no es una cantidad para nada comparable con los jóvenes que entran a estudiar medicina o carreras de ese estilo. Que aparte de que entran varios, al final quedan muy pocos estudiantes. En un tono orgulloso y al mismo tiempo de lamento, dijo que en Colombia sólo hay alrededor de entre trece y quince personas dedicadas 100% al tema de la astronomía, siendo él una de ellas. Habló de que no hay suficientes cupos para dictar clases de astronomía, dando como ejemplo el caso de la Universidad Nacional. Pero que sin embargo, se dictan clases todo el día todos los días en el observatorio a los interesados, aunque con el tiempo vayan abandonando la causa astronómica y científica.
Por último Sebastián preguntó: "Entonces ¿Qué le diría a los que entrarán en este tan interesante mundo de la astronomía? El profesor se mostró inseguro, sin saber qué decir, aunque luego su respuesta sería brillante. Dijo que no le diría nada a los que entrarán a la astronomía. Que se dirigiría más bien, al grueso de jóvenes a punto de empezar sus vidas universitarias, y los invitaría a hacer parte del mundo de las Ciencias y las Matemáticas. Habló del pésimo sistema educacional colombiano en los niveles de primaria y bachillerato. Destacó que ahora mismo, muchos estudiantes le tienen una fobia a las matemáticas, a los números, que a él le parece absurda. Que si el gobierno colombiano mejorara el sistema de educación, la cosa cambiaría. Sebastián, un poco más entrado en confianza, le dijo ---Claro, se lo puedo decir yo que tengo 17 años y voy en segundo semestre. La mayoría de los jóvenes hoy en día prefiere estudiar Medicina o Derecho. En mi univesidad, por ejemplo, entran por semestre, más de 200 a Derecho---. ---Sí, es que es así. Además, estoy seguro de que un matemático que dé clases en una buena universidad y publique con constancia, tiene mejor salida laboral que un abogado promedio---. ---Eso es todo. Muchas gracias de verdad, profesor Portilla. Fue un placer poder hacerle estas preguntas---. ---Igualmente, joven.---. ---Qué esté muy bien, pase un excelente día.---.
Sebastián salió del observatorio brincando en un solo pie, cantando victoria. Le produjo mucha satisfacción saber que estando a Lunes a las 11 de la mañana, ya había hecho la entrevista. Llamó a Melisa, y ella lo bajó de la nube. ---Parce, ¿Y grabó video?--- ---No.---. ---¿Grabó audio?---. ---No, Raigosa dijo que tomáramos notas.---. ---¿Tomó al menos una foto?---. En ese momento, Sebastián volvió a sentirse derrotado. No había constatado nada de su entrevista.
***
Al día siguiente, Sebastián volvió a la Nacional por la tarde. Esta vez, acompañado de Jorge y Diego. Dos amigos suyos. Fue nuevamente al observatorio y explicó a la secretaria lo que había pasado, y que necesitaba tener una constancia de que estuvo el día anterior hablando con el profesor. Ella tomó el teléfono, lo llamó y a los diez segundos, colgó. ---Ya viene, tranquilo---, dijo ella con el tono agradable de siempre. Sebastián sacó su cámara y la alistó para tomar la foto lo más rápido posible. Cuando el profesor Portilla apareció, Sebastián sintió una pena increíble por ser tan torpe, saludó y se disculpó. ---Tómame la foto rápidito que estoy en una reunión---. ---¡Tranquilo!--- exclamó Sebastián a medio gritar. Fue cuestión de medio segundo para que Sebastián levantara su cámara, enfocara al científico y tomara la foto por la que fue una vez más a la Nacional. Salió del observatorio, le tomó fotos al pequeño edificio, unas cuantas a la universidad en general y le dijo a su profesor, Andrés Raigosa, que el inconveniente de las fotos estaba solucionado, pues él le había comentado que le faltaba eso. Teniendo la constancia, Sebastián pudo marcharse a su casa para descansar, pero sólo un poco. Aún le quedaban muchas cosas por hacer, y la semana apenas empezaba, pero sabía que después de ese martes, ya no estaría más detrás de un científico.
Fotos por: Sebastián Duque Sánchez.
jueves, 13 de septiembre de 2012
'Wonderboy'
Una de las preguntas recurrentes en el barcelonismo hoy, más que las surgidas en torno al supuesto bajo rendimiento de Cesc (cosa que considero una total sandez), es la siguiente: ¿Será que Alexis no es el gran jugador que todos creíamos? Puedo decir que sí lo es. Su potencial ha incrementado muchísimo desde que llegó al Camp Nou, pero el verdadero problema es su proceso de adaptación. Mermado por lesiones la temporada pasada, implícitamente, la afición le dio un "plazo" para demostrar. Sin embargo, habiéndose jugado cinco partidos esta temporada, el chileno aún no emerge. Si bien es cierto que aporta en buena medida al juego colectivo, no da lo que se espera de él. Ha ejercido de extremo izquierdo, derecho, y contadas ocasiones, de 9. Lo que llama la atención es su buen rendimiento jugando como 'ariete', pues ahí se siente un poco más libre, como aquella noche de diciembre en el Bernabéu, cuando fue un dolor de cabeza para la defensa blanca.
El sistema del Barcelona se mueve en función de que Xavi, Iniesta y especialmente Messi, desplieguen su mejor juego. Alexis debe, así como Villa en su momento, encontrar su lugar en el engranaje y tomar mejor sus decisiones. Con un Pedrito al cien por cien, y un 'Guaje' en proceso de recuperación, Wonderboy tiene poco tiempo para hacerlo mejor. Casi siempre errado en la segunda decisión (como contra el Valencia), Alexis debe obsesionarse con el arco, pero que esa obsesión sea mesurada. Disparar ha ser su opción primaria. Pasar, la segunda. El problema está en saber cuándo hacerlo, y ahí es donde está fallando.
El 'messianismo' en el que está envueto este Barça es evidentemente un impedimento para él. Partiendo desde la banda se le nota a menudo incómodo, y una vez que se va de los rivales (cuando lo logra), se asemeja a un polluelo desamparado, sin saber qué hacer. "¿Busco a Messi? ¿Disparo? ¿Centro? ¿Qué hago?". Se necesita anarquía de parte de este jugador. Así como la que ejerce tiránicamente Messi, así como Iniesta es un electrón libre, justo así, Sánchez debe liberarse de esos interrogantes y hacer lo que le parezca, pues cuando lo ha hecho, le ha ido bien. No podría estar más convencido de que él efectivamente es el 'niño maravilla', pero sólo cuando alcance la autonomía que menciono, deslumbrará como todos queremos, con la regularidad que todos esperamos.
Suerte.
Suscribirse a:
Entradas (Atom)